Hola chicos, paso por aquí para comentarles mis experiencias en cuanto a la música, y algo más.
Yo inicié por incentivos, y por oído.
Sí, como lo escuchan: A los 3 años sentía las ganas infinitas de golpear y golpear todo lo que encontraba a mí alrededor. Mis padres, consiente de aquello, se preguntaban ¡porqué lo hacía constante!
Primero, me dieron una bolsa con arroz y par de limones porque pensaban que mi pasión era el canto. Pero yo, mostraba mi descontento y les puse a meditar xD porque decía, ¿cómo le digo que me gusta golpear la mesa? ¡Eso me llena! Pensaba así obviamente ignorando cómo se llaman los instrumentos de percusión y, por consiguiente, la batería.
Explico: El posible interés por el canto (según ellos) lo asemejaban porque escuchaba canciones para adultos, y me ponía a cantar esos temas, y claro, no era desafinado.
Llegué a la escuela, y ahí, descubrí mis habilidades para la batería /percusión: en segundo de básica la profesora tenía fe en mí en la materia, tanto así, que me puso a tocar los timbales, pero yo como siempre hecho el temeroso: bueno, talvez las cosas pasaron por algo, y fue un abre puertas para los proyectos a futuro: Sí participé, pero tocaba más despacio que un carro en descomposición jajaj.
Luego en el 2006, ¡la escuela de ciegos forma una banda! Aquí comenzó todo para mí, porque me integraron para instrumentos de percusión, y el maestro que tuve, me sacó las fuerzas para desarrollar mi talento oculto.
Llegué hasta el final del proyecto (duró más de un año) en el 2008, ingresé al coro por una audición que pasé. Al principio, confieso que no me gustaba estar allí, porque recibía año tras año las fiestas de navidad, paseos que aportaban mis conocimientos, y justo esos días teníamos presentación.
En medio de la rebeldía, me di cuenta que estar en el coro es una bendición, gracias a los casi 13 años que tenemos, el municipio se preocupó por construir un nuevo centro de apoyo para las personas con discapacidad, donde apoyan al arte y otros temas cotidianos, y como coro, somos beneficiados de aquello.
Tengo 11 años de experiencia en la batería, gracias al primer maestro que tuve por impulsarme las ganas y quitar el temor que me cegaba en ese tiempo. Sé piano básico, soy percusionista, y desde mis 13 años, tuve un interés fuerte por la producción musical.
Amo el mundo del audio, editar, musicalizar narraciones con mi propia voz, producir pistas.
En mi infancia, también nació aquel interés por el mundo de la locución comercial: yo no quería control remoto, ni juguetes flamantes, con una radio era feliz. Menciono esto, porque creo que la comunicación y la música son inherentes.
Esta fue mi historia, como notarán, no soy profesional en las ramas que me destaco (voy por el título de comunicación) pero eso no significa que no lo pueda hacer, los trabajos y admiración aparecen por tus capacidades. ¡Un saludo!