1. PrincesoGuerrero,
¡Buenas, gamers!
¿Saben? En un tiempo muy lejano cuando ustedes, gamers de batalla constante y otros juegos online no habían nacido y tal vez sus papás eran muy pequeños. El entretenimiento existía. No era online. Era tan lindo jugar con otra persona a tu lado, incluso si se era ciego como yo, y como otros de la vieja escuela. No todas eran máquinas arcade como tal, siempre con su sonido en 8 bits pero también ya usando sonido digital grabado con los años. También estaban los pimballs, el tejo, el bowling que era electromecánico y daba tanto gusto tirar una pelota de madera bastante grande en una superficie también de madera y disfrutar el sonido que producían los volos al ser derrivados...
acá en Argentina existe desde 1969 Sacoa, originada acá en Mar del Plata, donde vivo yo, así como Havanna, la fábrica de aquellos chocolates y alfajores tan ricos que también se originó acá en Mardel y se extendió.
Sacoa llegó a tener muchas sucursales dentro del país. Tal vez muchos paisanos acá en la sala se la pasaron bomba en Sacoa.
En los 80 estaban las máquinas arcade que denominábamos "fichines", ya que había que introducir fichas para jugar. En otros países andaban por ahí, en locales de barrio. ¿Dónde quedó todo eso?
Ya para cuando yo era chico, Sacoa cambió la construcción de fichines por la tecnología de tarjeta magnética, tecnología que hasra hoy se utiliza. Consiste en pasar por una ranura que hay en cada arcade o fliper. Cada juego tiene un costo, así que hay que llegar y comprar una tarjeta o recargarla, si ya se tiene. Cómo no, desde siempre estuvieron ahí los juegos más mecánicos y electromecánicos como los autitos chocadores. Desde los 2000 y ni se diga hoy, se fue evolucionando a la realidad virtual. Ahora están de moda los simuladores, que son coches donde te subís (con toda la otra gente que también se sube) se cierran las puertas y comienza una locución que te da las primeras instrucciones. Lo que hace el simulador físicamente es moverse por una plataforma y seguir los movimientos programados en pantalla, donde se ve que te movés en un vehículo llendo por superficies como barro, nieve u otras cosas, y cuando el simulador en pantalla choca, para aumentar la sensación la máquina también se sacude oportunamente.
Hay otros juegos como la ola es un juego mecánico al que te subís y te revolea dándote unas cuántas vueltas.
Cómo no, todavía están los viejos arcade de su época dorada. La última vez que fui, un poco antes de la cuarentena, estaban el PackMan, Mario Bros, Street fighter 2, bomberman, las tortugas ninja...
En fin, que Sacoa es algo apasionante que jamás me aburrió ni me aburrirá, y de hecho estoy pensando ir yo solo hasta allá en unas semanas, a ver a qué juego.
Desde chiquito quise tener siempre alguna d estas máquinas en casa, si por ejemplo cuando yo era muy chico había una que me encantaba, onsistente en un payaso que presionando 4 botones tenía que bailar al ritmo de algunas canciones infantiles americanas que cantaba y luego (como otra cosa más que hacen estos juegos en Sacoa) empiezan a salir cuupones por una ranura que hay debajo del gabinete. Estos cupones pueden canjearse por algo copado, por ejemplo golosinas u otra cosa que se ofrezca.
También estaba el clásico juego de matar unos cocodrilos que iban saliendo a la superficie de la máquina y reaccionando rápidamente tenías que darles para obtener puntos, antes que vuelvan a entrar.
También en mi infancia llegaron a traer nastantes máquinas arcade tanto para salones infantiles de cumpleaños como en restaurantes. En esto último... Hasta donde he visto, ya no hay ningún arcade en restaurantes. Una pena.
Ahora sí, les dejo comentar.
Score: +0