como dice alguien más arriba, la familia es la familia, aún así, no siempre saben como incluir a una persona ya no solo con discapacidad visual, sino que con cualquier discapacidad, en mi caso, el problema los agarró de sorpresa, yo perdí la vista a los 10 años, y mi familia no sabía que hacer, como tratarme y así, al menos, mis papás, porque después de superar la sorpresa, mis hermanos mayores fueron quienes empezaron a tratarme como a cualquier persona normal.
A mí nunca me adaptaron juegos, pero jugaban conmigo, nadie en mi familia sabe braille, aún así, mi hermana mayor, me ayudaba a estudiar, me leía las cosas, o me dictaba, o ella escribía y yo dictaba, en fin, muchas cosas, y cuando no podía, gravaba las cosas, y me las dejaba listas para que yo estudiara solo.
No agarré una computadora, hasta hace unos 6 o 7 años, pero mis hermanos me enseñaron a utilizar la máquina de escribir, sí, esa máquina que es más escandalosa que nada, y de las que usaban antes las secretarias, y para que pudiera usar el teclado, yo hice las letras en braille en una mica, y se las pegamos.
como dije, juegos no, porque casi siempre jugábamos dominó, y en eso, las fichas vienen con oyos, con la cantidad exacta, de ahí en fuera, a mí siempre me gustó jugar fut boll, y en eso, mis sobrinos nunca se cortaron para incluirme en el juego, daba lo mismo que jugáramos con un balón o con una pelota, pero nunca la adaptaron para jugar conmigo, y la verdad, eso no me importaba, y no era el único, ya que en mi familia, uno de mis sobrinos, tiene una discapacidad motriz, está en silla de ruedas, y aún así, a él también lo ponían a jugar.
Más arriba dijeron, algo con lo que me siento identificado, las personas más cercanas a mi nucleo familiar, es decir mis hermanos y mis sobrinos, nunca de los nuncas me han hecho menos, y pobre de aquel o aquella que lo haga, siempre han sido muy incluyentes, si ellos van a algún lado, me llevan .
La familia un poco más lejana, primos y así, nunca saben que hacer conmigo cuando hay una reunión familiar, así que trato de pasar desapersivido, porque en esas reuniones, es como si yo no fuera, y eso está bien, aprendí a no sentirme mal, pero esto solo pasó, cuando me quedé ciego, porque antes, no, y siempre trataban de jugar, o de platicar, ahora, cada quien en su rollo y ya.
Por ahora, hasta aquí mi aporte, porque siento que ya me extendí demasiado. Saludos