5221. elangeldelaguarda,
A ver, el T-Cast es real, existe como tal y siempre prevalece sobre la orden que haya dado la torre.
Hay que tener en cuenta que, aunque la torre dé las altitudes correctas, no se las da a todo el mundo a la vez, y, aunque así fuera, cada avión tarda, por sus características o por la velocidad del viento o cómo le da, un tiempo diferente en subir o bajar.
Por si alguien tiene curiosidad, el auténtico T-Cast, como la mayoría de sistemas de un avión, sobre todo, los que tienen que ver con avisos críticos o con avisos que sí o sí deben verbalizarse, también habla.
Cuando hay que ascender dice: "Traffic, ascend, ascend now".
Cuando hay que descender, "Traffic, descend, descend now".
Hay tonos específicos, aparte de la voz, para todo, y son un estándar, igual en todas las marcas y modelos de avión.
Hay tono para cuando se desconecta el piloto automático, advirtiendo de que ha pasado a manual y todo lo que se haga depende del piloto.
Hay tono para indicar que se ha alcanzado la altitud objetivo, hay tonos diferentes por cada tipo de alarma y mensajes, todos en inglés, de cada situación.
Y, para los curiosos y curiosas, que sé que hay más de uno que quisiera saber qué pasa en realidad en un avión, cuando se está bajando para aterrizar, el sistema va indicando cuánto queda, en números, para tocar el suelo.
Si indica "Minimums" y no se ve la pista, hay que volver a intentarlo cuando se vea.
A ver, sé que esto no tiene nada que ver con el juego, pero también sé que hay gente que tiene curiosidad.
Las radios, en los aviones, no tienen interferencias, ni el chasquido típico de un walkie-talkie, pues van en AM, (amplitud modulada), y no en FM, (Frecuencia modulada).
Las comunicaciones que no son para nosotros, que están en el juego en el idioma original, tienen interferencias porque están grabadas desde un scanner doméstico. Para evitar esas interferencias, las radios de los aviones tienen un filtro que no las deja pasar, es un filtro que quita las interferencias de estática.
En la cabina de un avión, tanto las radios como la computadora que habla los avisos suenan más grandes, pues el altavoz de cada una de ellas está contenido en el propio panel.
El cine es el gran responsable de que no nos enteremos de cómo suenan, realmente, las cosas.
No hay nada más alejado de la realidad que las alertas que se escuchan en las películas.
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