dreico te cuenta una historia de terrór

67 Mensagens, 3 Páginas:  1 2 3 ↖ Voltar a lista de tópicos

Pontuação: +0

1. dreico ,

hola chicos, como eliminaron mi tema por ya no ser temporada, creo este, para seguír perturbándolos, como inaguración, con ustedes, Mi horror en La Liberté...

Este relato es fruto de una mente enferma. Debes saberlo antes de
comenzar la lectura. Hace seis meses que estoy con antidepresivos y
antipsicóticos, medicación que más que mejorarme, hace que mi paranoia y
mi dolor aumenten. Mi realidad, mi verdad, es absolutamente
insoportable. Tengo pocos momentos de lucidez, como éste, en los que
puedo escribir. Momentos en los que la ansiedad y la depresión se
sustituyen por un sentimiento de ira que me sobrepasa. Momentos en los
que tengo que cuidarme de mi otro yo. Este escrito me llevó cuatro meses
redactarlo. A lo largo del relato entenderás la razón.

Lo que viene a continuación es mi verdad. En tus manos queda decidir si
este relato es real o si simplemente es una extensión de mi locura.
Debes saber también que esta historia no es apta para gente sensible o
fácilmente impresionable. Todo lo que voy a relatar puede inducir al
lector a cometer mis mismos errores, aunque en mi opinión todo el mundo
debería leerlo. Es algo que nos afecta a todos, nos implica a todos. La
gente debe saber qué es lo que se está cociendo aquí, qué es lo que está
pasando, y hacia dónde nos dirigimos; pues es la única manera de
pararlo, por más doloroso que sea.

Te he advertido, ¿estás decidido a seguir a partir de este punto?

Bien, comencemos.

Desde que era pequeño el mundo de la informática me ha apasionado,
especialmente el mundo de Internet. Para mí era algo increíble y
fascinante que dos personas en extremos distantes del país pudieran
comunicarse en tiempo real sólo a través de un equipo informático. Mi
pasión y mi curiosidad me llevaron a aprender sobre protocolos y
configuraciones de redes, servidores, programación web… hacking.

Pensarás que con esta afición tuve que haber estudiado una carrera de
informática, pero hay algo que me apasiona aún más. El saber, el
conocer, el investigar. El divulgar. Todo esto, junto con mi curiosidad
innata, hicieron que me decantara por el periodismo.

A la hora de preparar mi tesis final, vi la oportunidad de juntar mis
dos pasiones. La idea de la tesis final consistía en investigar sobre un
hecho concreto, tratando de dar una información completa y veraz sobre
el mismo. Sin amarillismo, la pura y simple verdad. Aquellos días estaba
muy de moda el concepto de la Deep Web. La Web profunda, el lado oscuro
de internet. Muchos rumores e historias circulaban sobre la misma.
Pedofilia, asesinos a sueldo, hackers a sueldo, mercado negro de armas,
videos de autopsias alienígenas, documentos secretos del gobierno y un
largo etcétera. La gente estaba fascinada y percibía a la Deep Web como
un lugar oscuro y siniestro, donde lo más horrible del ser humano salía
a flote.

Yo, que presumía de tener un conocimiento amplio sobre internet, sabía
de la existencia de la Deep Web. “Sabía” (y me perdonarás que use
comillas) que ahí abajo no podrías encontrar ningún documento secreto
del gobierno, al menos no así como así. Por tanto, mi tesis vendría a
dar una explicación completa sobre la Deep Web, en la cual además
vendría a demostrar que no era algo tan “chungo” como la gente lo pintaba.

Para ello me propuse investigar y tratar de encontrar la famosa web
francesa La Liberté, una supuesta página alojada en la Deep Web que
tenía un nivel de protección altísimo, tanto que necesitabas una
invitación para entrar. Según la leyenda, en La Liberté podías encontrar
foros de lo más diverso. Desde pedofilia, hasta supuestos documentos con
evidencia que probaría ciertas teorías de conspiración, como los
Chemtrails y los Illuminati.

En realidad, lo que quería demostrar era que dicha web no existía,
tumbando uno de los mitos más populares de la Deep Web. Y de existir,
demostrar que su creación había tenido lugar después de la aparición de
los rumores e historias sobre ella, y que no contenía ningún documento
de interés.

Cada vez que pienso en ello, me dan ganas de llorar.

El primer paso, si existía dicha web, era conseguir una invitación para
la misma. Para ello no tuve otro remedio más que relacionarme con la
gente que accede a este “lado oscuro”. No fue tarea fácil, pues no sólo
debía proteger bien mi equipo, sino entrar en sitios con contenido
delictivo en los cuales dejar rastro podría suponer pena de prisión.
Adopté medidas adicionales para proteger mi privacidad en la medida de
lo posible. Mi objetivo eran los chats de las webs con contenido
pedófilo y snuff, evitando las imágenes y el contenido de las páginas.
Durante meses me fui haciendo conocido en estos sitios, hasta que un día
apareció Grimm.

Grimm era un habitual en uno de estos chats, y alardeaba de tener acceso
a La Liberté. Conseguí ganarme su confianza y su amistad hasta que, al
cabo de un tiempo, accedió a darme una invitación. Entonces pude
confirmar la existencia de La Liberté. Fue una sorpresa mayúscula; como
ya dije, mi intención era tumbar el mito y, por el contrario, lo hice
real. Incluso confirmé que su existencia se originó mucho antes de que
aparecieran los rumores en la web superficial.

¿Si existía La Liberté… qué más existiría?

El concepto de mi tesis cambió radicalmente, como os podéis imaginar. La
Liberté es un foro normal y corriente, con el añadido de que para
acceder a cada subforo necesitas crear un nuevo usuario. El contenido es
tal y como la gente lo describía. Aquí puedes encontrar lo más horrible
y oscuro que te puedas imaginar, también las pruebas a ciertas teorías
conspiratorias. Y aquí comenzó mi decadencia y mi descenso a la locura.

No sé cuántas horas, en cuántos días navegué por el subforo de
conspiraciones. Quedé sumamente impactado con muchas de las
revelaciones; pero lo que más me atrajo fue la conspiración del Proyecto
Monarca.

¿La fascinación por este proyecto fue inducida por un tercero, o
realmente me interesaba este tema? No estoy seguro. No estoy seguro de nada.

El Proyecto Monarca era una continuación del proyecto MK-ULTRA
desarrollado por la CIA, y que supuestamente terminó en la década de los
setenta. La finalidad del proyecto MK-ULTRA era la de conseguir
controlar la mente de la gente a base del suministro de drogas, como
LSD, y la creación de traumas a través del abuso verbal, físico y
sexual, provocando la disociación de la mente del individuo. Cuando las
aberraciones del proyecto MK-ULTRA se hicieron públicas, la CIA dijo
haber terminado con dichos experimentos. Pero mucha gente creía que
simplemente le cambiaron el nombre y lo hicieron más secreto, y
siniestro. A la continuación del MK-ULTRA la llamaron Proyecto Monarca,
o Programación Monarca. Y yo tenía pruebas de su existencia.

No sólo podía probar la existencia del Proyecto Monarca, sino de todo el
complot y conspiración en torno a él, sobre todo en la industria del
cine y la música. Películas desde /El club de la lucha/ hasta /Sucket
Punch/ esconden mensajes sobre la programación monarca, y muchas
estrellas de la música son personas que han pasado por esta
programación. Autómatas humanos, siendo las chicas Disney su máxima
expresión y Lady Gaga la “reina”, por así decirlo. Todos los videos de
Lady Gaga tienen claras referencias a la programación monarca.

Toda la industria del entretenimiento, tomada por estos esclavos, para a
su vez programar a la gente de a pie. El conocimiento que tenía en mi
mano, la información que poseía, podía cambiar el mundo. Podía liberar a
la gente de su “falsa libertad”.

Pero ¿por qué esta información no había salido de La Liberté? Es cierto
que en la web superficial se comentaban todas estas cosas, pero no
pasaban de ser más que rumores realizados por cuatro chiflados
aburridos. En La Liberté había pruebas de todo esto… no lo comprendía.
Pero tanto daba, estaba decidido a sacar a la luz todo ese material.
Fotos, videos, documentos del gobierno… sería un auténtico bombazo.

Entonces entró Grimm en juego de nuevo. Me dijo que el material que se
encontraba en La Liberté era material liberado de otra web, aún más
profunda y secreta, llamada Sion. Para acceder a Sion necesitabas ser
invitado al igual que en La Liberté, y sólo usuarios con acceso a La
Liberté podían serlo… unos pocos elegidos.

Me comían las dudas. Tenía material más que suficiente para provocar una
auténtica revolución, pero si lo hacía, perdería la posibilidad de
acceder a Sion, donde, según prometía Grimm, hallaría información mucho
más impactante que la de La Liberté. A su vez, acceder a Sion implicaba
pasar más tiempo en La Liberté, relacionarme con los usuarios, con el
riesgo que eso implicaba. Ni siquiera Grimm sabía lo que realmente me
traía entre manos, o eso pensaba yo entonces.

La pregunta volvía a mi cabeza, “¿por qué esto no ha salido de La Liberté?”.

Tomé la decisión de llegar hasta el final y tratar de ganarme el acceso
a Sion. Entonces las cosas se pusieron aún más extrañas. Para ganarme la
confianza de toda la gente en La Liberté, tuve que convertirme en un
monstruo. No sólo me centré en comentar en el foro de conspiraciones (de
hecho, esto era lo que menos hacía, como si no tuviera mucho interés),
fingí ser una persona con un gusto hacia la pedofilia y el snuff igual
de extremo que el del resto de usuarios.

Grimm publicaba mucho de este material, que tenía que ver con total
repugna para no desentonar en las conversaciones del foro. No advertí
entonces que aquello parecía una prueba hacia mi persona, pues los demás
usuarios me preguntaban qué me había parecido tal o cual parte, o qué me
había excitado más… Ahora que lo pienso, no comprendo cómo pude estar
tan ciego. Como fui tan soberbio y tan estúpido.

Mi resistencia hacia toda aquella inmoralidad fue creciendo, hasta que
las cosas subieron de nivel. ¿Conocéis la película /A Serbian Film/? Una
de las escenas más polémicas implicaba a un bebe, y ahí lo vamos a
dejar. No tengo fuerzas para describir o nombrar la escena por lo que
es. Los videos que tuve que ver, eran como esa famosa escena… sólo que
en esta ocasión, los bebés no eran muñecos. En algunos videos, la madre
se comportaba como en /A Serbian Film/, en ocasiones incluso participaba
directamente. En otras, chillaba y gritaba tratando de salvar a su
pequeño de… mierda, es que tienen un auténtico mercado negro con esa
basura. Secuestran a mujeres embarazadas, y las… cambian, ¿vale? Y
aceptan lo que les va a pasar a sus niños. Algunas despiertan al final y
se dan cuentan de lo que está pasando; ellas son las que gritan. Pero
ésa no es ni por asomo la regla general. No sé lo que les pasa a los
niños, sólo sé que a la mayoría los dejan vivir, no sé con qué fin. No
me atrevo a imaginármelo.

Tras esta experiencia, padecí unos cuantos días de crisis nerviosas;
pero estaba más decidido que nunca a acceder a Sion, desvelar toda la
información que pudiera y acabar con esa maldita mierda.

Entonces Grimm cambió el contenido de los videos. Durante un tiempo
fueron videos pornográficos normales y corrientes, cosas que cualquier
ser humano normal podría ver. Eso hizo que me tranquilizara un poco.
Luego los videos volvieron a subir de nivel. Creía que los videos de los
bebés era el límite del horror, pero había más, mucho más… tanto, que no
me atrevo a decirlo.

El ciclo era siempre el mismo, los videos subían hasta un nuevo y
extremo nivel que me dejaba noqueado, para luego pasar durante unos días
a videos normales, que poco a poco iban subiendo su intensidad hasta
llegar al límite anterior… que volvía a ser superado. No me daba cuenta
de la manipulación que estaban haciendo. Llegué a ver sin asco los
videos de bebés, entre otras cosas.

Pasaron meses, hasta que por fin llegó el día. Después de enfrentarme a
un nuevo y horroroso nivel, recibí un mensaje de Grimm con un link
«.onion». Una invitación a Sion. Lo había conseguido, tenía acceso al
lugar más oculto y siniestro de la Deep Web. El lugar que se había
convertido en mi obsesión, el lugar por el que había sacrificado parte
de mi cordura, no sabía hasta qué punto.

Entré en Sion. La web no era ningún foro, ni un blog, sólo contenía un
video. El fondo… no recuerdo el color. A veces lo visualizo negro, otras
blanco, otras verde; pero por alguna razón, creo que el fondo tenía
todos esos colores, y más. Accioné el video y apareció un hombre con
traje que decía lo siguiente en inglés:

”Felicidades por haber accedido al último nivel de Monarca. El proceso
está a punto de comenzar. Su maestro lo guiará en este último tramo, y
recuer…”.

Y entonces, todo se volvió negro por unos segundos, que en realidad
fueron días. Seis días, en concreto. Desperté con dolores horribles por
todo el cuerpo. Dos dedos de mi pie derecho estaban rotos y tenía
múltiples golpes y quemaduras por todo el cuerpo. En la espalda tenía
una herida reciente, como si alguien me hubiera clavado un cuchillo o
algo similar, aunque no muy profundamente. No me había duchado ni
afeitado en todo ese tiempo.

Lo peor era el dolor de cabeza… un dolor punzante y terrible. Y el
miedo. ¿Qué había pasado? Cuando me repuse un poco, traté de entrar de
nuevo en La Liberté. La página había desaparecido, y en su lugar había
una imagen de una mariposa monarca. No pude encontrar a Sion de nuevo.
La información de La Liberté ya no estaba a mi alcance.

Lo había perdido todo… ¿o nunca había existido?

El recuerdo de todos esos meses de tortura, así como la incertidumbre de
todo lo que había sucedido en los seis días oscuros, como yo los llamo,
terminó por derrumbarme. Además, habían veces en que todo se volvía
negro y despertaba a los pocos segundos, descubriendo que habían pasado
minutos, a veces incluso horas.

Me sometí a tratamiento psiquiátrico, pero los médicos no consideraron
necesario institucionalizarme. Dicen que tengo un trastorno
obsesivo-compulsivo, con ideas psicópatas y delirios. Curiosamente, el
tratamiento no me hace efecto, como dije al principio, sólo me hace más
dócil y vulnerable a los períodos de oscuridad.

He intentado suicidarme en múltiples ocasiones, pero no lo consigo.
Cuando estoy a punto de conseguirlo, experimento uno de esos momentos de
oscuridad. No me van a dejar hacerlo, me han programado para que no me
suicide. Para que mi otro yo salga cuando estoy a punto de hacerlo.
Tampoco puedo divulgar la verdad, por eso he tardado tanto en escribir
esto. Hay días en los que sólo pude escribir una palabra de este texto,
a veces un párrafo entero, pero poco más. Por suerte, no experimento
momentos de oscuridad cuando escribo, pero sí me olvido enseguida de lo
que estoy haciendo y no lo recuerdo hasta el día siguiente. No sé si
podré subirlo, creo que he encontrado una manera de bloquear a mi otro
yo y la programación, pero no estoy seguro.

Y aquí va mi conclusión, fruto probablemente de mi mente enferma, pero
yo creo que es real. En el último párrafo he hablado sobre mi otro yo.
Ése es el objetivo del Proyecto Monarca, y yo he sido un experimento
dentro de una nueva forma de programación. Quizás sólo sea uno más.

Grimm fue mi guía, quien me llevó de la mano durante todo el proceso. A
través de La Liberté, si es que ésa era la auténtica, si es que ésta a
su vez existe, iniciaron la programación, creando traumas a través del
contenido publicado. Me hicieron romper en muchas ocasiones la barrera
de la cordura, para devolverme después a un estado de calma. Sin darme
cuenta, me estaban induciendo a un estado disociativo.

Así llegamos a Sion, cuando la programación finalizó, disociándome por
completo y creando definitivamente a mi otro yo, el perfecto esclavo que
está a sus órdenes, quienes quiera que sean ellos. Lo que más me
obsesiona es lo que pudo pasar en esos seis días, y lo que hace mi otro
yo cuando toma el control.

Lo más triste… es que pude detener todo esto antes, si no hubiera sido
tan ambicioso. Estoy pagando el precio de mi soberbia.

En este texto hay un mensaje oculto para todos aquellos que lograron
eliminar su programación monarca, si es que los hay y consigo subir este
texto a internet. Necesito ayuda, aunque sea para matarme. Cualquier
cosa es buena para detener esta tortura.

Al resto, sólo deciros que no intentéis acceder a La Liberté nunca. Y si
lo hacéis, sacad la información que contiene y no os detengáis a nada
más. Sacad a la luz toda la verdad y no os dejéis engañar. Sé, de todas
maneras, que esto parece (y seguramente lo es) el relato de un loco
conspiranoico.

Pontuação: +0

2. Rayo.bgtr ,

buenardo.

Pontuação: +0

3. el_helado_que_muerde,

alto hilo, si xd :sovretodo a los que nos gusta las historias de terror, muuuy buen travajo dreico

Pontuação: +0

4. TheDreamer,

Wow, 16000 carácteres...

Pontuação: +0

5. Rodrisosa23,

quede. cómo que carajoooos?

Pontuação: +0

6. eren,

me encantó esa historia @dreico, si me lo dices a mi, yo creo que deberías crear un canal de youtube o un blog y subir tales marabillas xd.

Pontuação: +0

7. dreico ,

esto ba para quienes ya leyeron mis historias, como todo lo del otro hilo ya se perdió, cuales historias de las que ya puse quieren que resuba aquí?

Pontuação: +0

8. el_helado_que_muerde,

por mi suvilas todas, nó hay que perder esas cositas hermosas!

Pontuação: +0

9. C-Kan ,

me lo guardo felicidades bro!

Pontuação: +0

10. dreico ,

chicos, no se si se estén asiendo una idéa ekibocada, pero boi a explicár las cosas, las historias no son mías, yo solo edito y corrijo, tengo historias escritas por mí, pero la berdad no se si subirlas, no son tan buenas como estas ni de lejos, si creyeron que las ise yo, me disculpo encerio, en ningún momento quise engañarlos

Pontuação: +0

11. Ronald-Weasley,

Posteo para que se me quede en últimas participaciones.

Pontuação: +0

12. Rayo.bgtr ,

sí, yo vi un par en intrnet ahce un tiempo, el solo edita ciertas partes para que sea más fácil de leer.

Pontuação: +0

13. dreico ,

bien, comensemos con los rituales, con ustedes, el juego de las plegarias...

Frente a una situación desesperada, sea cual sea, la gente se encuentra
rogándole a Dios una respuesta, y, si no es a Dios, a algún ente, objeto
o simplemente esperan que mágicamente todo se solucione para poder
seguir con sus vidas. Sienten que necesitan un soporte externo, algo que
los haga mantener la esperanza aunque sea un día más en un mundo cada
vez más consumido por los problemas que ellos mismos generan. Y, frente
a esta petición, ¿cuáles son las respuestas habituales? Lo mismo de
siempre: sugestión vana que nos hará vivir ilusionados o silencio
desgarrador que nos encerrará en la angustia y nos empujará a cometer
actos de frenético desquicie.

¿No creen que deberíamos tener un verdadero soporte externo?

¿Uno que podamos SENTIR, VER y TOCAR?

Bien, si están de acuerdo conmigo, entonces les sugiero que lean
atentamente lo que detallaré a continuación. Pero les advierto, lo que
decidan hacer con la información que les daré queda bajo su absoluta
responsabilidad, así como las consecuencias que puedan traerles.

El único ente «sobrenatural» del que podemos dar fe de su existencia son
los muertos. Los muertos están en todo el mundo, y están desde
siempre. Las ceremonias rituales a los muertos comenzaron hace más de
sesenta mil años, antes de que el hombre fuese hombre. Con el tiempo, el
culto se desarrolló diversas religiones y creencias, todas dirigidas a
alabar a nuestros antepasados, la mayoría de formas distantes e
indirectas. Tuvimos que avanzar hasta la Edad Media para intentar,
clandestinamente, contactar a los difuntos de manera directa mediante
/mediums/ o la así llamada «magia negra» o «necromancia». El último gran
salto fue con la curiosidad esotérica de los científicos
fenomenológicos, cuando en 1901 el doctor Duncan MacDougall,
estadounidense de Massachusetts, realizó los experimentos que
establecían que el alma humana tenía peso (veintiún gramos). La gente
siente la presencia de los muertos. Cuando dormimos, cuando caminamos
por la calle, cuando tomamos el subterráneo; cada hora de cada día
estamos acompañados por algo que parece confundirse por nuestra
conciencia. Pero a veces lo escuchamos, y entonces sabemos que no
estamos solos. Sí, hay una barrera que nos separa, pero no estamos solos.

Los muertos, todos los muertos, forman un solo ente (me referiré a este
ente de ahora en adelante como «El Ente del Más Allá»). Al igual que se
dice que Dios es el conjunto de todas las cosas, El Ente del Más Allá es
el conjunto de todos aquellos que hicieron posible nuestra existencia,
nuestra historia y nuestro modo de vida. Resumiendo, El Ente del Más
Allá es la parte de Dios más cercana a nosotros.

El ritual que describiré es un ritual de invocación, seguido de un pacto
de sangre. Puede realizarse en cualquier cementerio que disponga de
fosas terrestres, a cualquier hora del día. Sugiero hacerlo rápido y en
una tumba reciente para no llamar mucho la atención.

Se necesitarán los siguientes elementos:

• Incienso (puede ser en flor, pastillas, sahumerios, etcétera)
• Sal gruesa
• Maíz en granos
• Una tarjeta en blanco
• Un bolígrafo o algo para escribir (lápiz no)
• Un envase o recipiente pequeño con tapa
• Vino (una botella)
• Un papel en blanco (A4 o tipo carta)
• Una jeringa hipodérmica
• Un alicate o cortauñas
• Un incinerador o parrilla
• Fósforos o encendedor
• /Concentración/

Lo primero que deben hacer es visitar algún cementerio, panteón o
iglesia en donde haya alguien enterrado. No es necesario que lleven
ningún elemento en este primer recorrido, ni tampoco que sea el mismo
cementerio en donde realizarán el ritual. Pueden llevarle una flor a
alguien si lo desean, pero no es obligatorio. El Ente del Más Allá
notará su presencia y el tiempo para el ritual comenzará a correr.

A partir de la fecha y la hora en la que visitaron aquel lugar, tienen
exactamente una semana para ir al cementerio (esta vez debe tener fosas
comunes) y seleccionar una tumba. En esa tumba se arrodillarán, se
besarán la mano derecha y extenderán el beso hacia el nombre inscrito en
la lápida. Luego, esparcirán la sal a su alrededor haciendo un
semicírculo para purificar el lugar. Una vez hecho esto, cierren los
ojos y tómense su tiempo para concentrase en algún familiar, conocido o
alguna persona que haya muerto. Es recomendable pensar en alguien
fallecido recientemente, puesto que los ancestros antiguos son un poco
más difíciles de contactar. En un momento dado, sentirán la brisa en la
cara, y por más abrigo que lleven sentirán un escalofrío en todo el
cuerpo. Cuando lo sientan, es hora.

Dejen el incienso al pie de la lápida mientras dicen: «Benditos son los
ojos que no ven, pues en la noche ven el día y en la tempestad la
calma». Ahora dejen el maíz por delante del incienso, y digan: «Bendito
es el cuerpo que no siente, pues su cuerpo siente lo superfluo y su alma
siente lo esencial». Por último, abran la botella de vino y vuelquen /la
mitad/ sobre el incienso y el maíz mientras dicen: «Bendita es la tierra
que los contiene, el abrigo cálido para el invierno de los días».
Terminado esto, tapen la botella y anoten en la tarjeta en blanco el
nombre de la lápida, la fecha de nacimiento y muerte y todos los datos
que haya disponibles (últimas palabras, lugares de nacimiento y muerte,
estudios o grados militares, cosas importantes que hizo en el transcurso
de su vida…).

Ahora llenen el recipiente con tierra de la tumba y tápenlo. /La tierra
no debe estar mojada con vino/, de lo contrario, El Ente del Más Allá
interpretará que le retiran la ofrenda y se negará a hacer el trato
(quizá hasta los maldecirá). Vuelvan a cerrar los ojos y otra vez
concéntrense en algún difunto. Si no sienten la brisa y el escalofrío,
levántense y vuelquen el resto del vino sobre la tumba, formando una
equis. Arrojen el recipiente con tierra y váyanse de inmediato del
cementerio sin hacer contacto visual con nadie. No vean a nadie a los
ojos ni a ningún espejo en las siguientes veinticuatro horas, no vuelvan
a entrar a un cementerio en los próximos tres años y /jamás/ intenten de
nuevo el ritual. Si vuelven a sentir la brisa y el escalofrío, significa
que El Ente del Más Allá aceptó sus ofrendas y les tiene cierta
simpatía. Extiendan otro beso hacia la lápida y retírense.

Vuelvan a su casa con la botella de vino, el recipiente y la tarjeta.
Guarden el recipiente y la tarjeta en un lugar seguro, donde procuren no
perderlos. En el papel en blanco tamaño A4, realicen su petición. Deberá
estar escrita en tinta con letra legible y ser lo más objetiva posible,
puesto que El Ente del Más Allá suele valerse de los «vacíos legales»
para que las cosas no resulten como se esperan. Una vez que terminen de
escribir la petición, tomen el alicate y córtense una uña cualquiera de
la mano izquierda. Ahora tomen la jeringa hipodérmica. Vuelvan a
concentrarse en algún difunto, y cuando sientan la brisa y el
escalofrío, digan: «Entrego lo material y recibo lo esencial, esta es la
deuda de los Ancestros». Entiérrense la aguja en alguna vena (les
sugiero la del antebrazo derecho o izquierdo) y llenen la jeringa con su
sangre. Recomiendo que se pongan un algodón con alcohol al sacar la aguja.

Pongan el contenido de la jeringa en la botella de vino. Luego pongan la
uña que cortaron dentro de la botella y tápenla. Digan en voz alta: «La
sed será saciada, rojo con rojo, por siempre y para siempre», y agiten
la botella para mezclar bien todo.

Váyanse a dormir. Después de perder tanta sangre, seguro lo necesitarán.

A partir de la fecha y hora en la cual dejaron las ofrendas en la tumba,
tienen una semana para consumar el pacto de sangre. Deberán volver al
cementerio (o ir a otro que tenga fosas comunes) y seleccionar otra
tumba. Se arrodillarán y extenderán un beso a la lápida como en el
primer ritual. Concéntrense de vuelta en un difunto y esperen a sentir
la brisa y el escalofrío. Cuando lo sientan, digan: «La sed será
saciada, rojo con rojo, por siempre y para siempre», y hagan un pequeño
pozo en la tierra. Allí vuelquen el contenido de la botella y observen
lo que sucede. Lo habitual es que la uña que estaba en la botella se
entierre como si fuera aplastada y sea tragada por la tierra, pero si
esto no sucede, no hay que preocuparse; solo quiere decir que en ese
momento El Ente del Más Allá no tiene mucha sed.

Vuelvan a tapar el pozo con tierra, extiendan un último beso a la lápida
y retírense.

Con la petición que escribieron antes, vayan al incinerador o parrilla
que prepararon y enciendan el fuego. Echen un poco de sal a las llamas
para purificarlas y concéntrense una última vez en alguien difunto,
hasta que sientan la brisa y el escalofrío. Cuando lo sientan,
acérquense al fuego y digan, con actitud convencida: «Hago reclamo de mi
retribución, su deuda, la sed que yo sacié, exigiendo el presente
contrato. ¡Responded mis plegarias!». Arrojen la petición al fuego y
esperen a que el papel termine de consumirse. Por último, y para hacer
válido el contrato, digan: «Ahora su deuda es mi deuda, y cumpliré la
petición hasta que la Hermandad sea sellada con el Alma».

Dentro de tu cabeza oirás una voz difícilmente reconocible, que te dirá:
«La verdad os liberará». Lo más probable es que lo diga en tu idioma,
aunque a veces lo dice en latín: «Veritas vos liberabit».

A partir de ese momento, el pacto está sellado.

Bien, estos son los pasos a seguir para invocar la ayuda de los muertos
(El Ente del Más Allá). Ahora haré algunas aclaraciones, solo para tener
en cuenta antes de tomar decisiones precipitadas:

  1. Una vez realizado, el contrato no se puede deshacer bajo ningún motivo.
  2. Las garantías del contrato son el recipiente de tierra y la tarjeta
  3. con los datos de la primera lápida. Si se hace válido el contrato, el
    interesado deberá mantener esos dos objetos por el resto de su vida. Si
    en algún momento los pierde, se le aplicará el castigo de quienes no
    cumplen el contrato.
  4. Para cumplir con el contrato, el interesado deberá, una vez por año,
  5. realizar una visita a un cementerio y dejar una ofrenda, sea cual sea,
    en una fosa común.
  6. La sangre de la jeringa no tiene por qué ser la del usuario (mientras
  7. la uña sí lo sea), pero debe ser humana y de una persona viva.
  8. Si alguna de las frases detalladas se dice de manera errónea (con
  9. excepción de «Ahora su deuda es mi deuda, y cumpliré la petición hasta
    que la Hermandad sea sellada con el Alma») el contrato no tiene validez,
    y no se aplicará ningún castigo al beneficiario.

Por último detallaré el castigo impuesto por no cumplir el contrato,
extraído de los antiguos manuscritos de Abdul Alhazred y traducidos al
español:

Lo primero que dijo fue: «Benditos son los ojos que no ven, pues en
la noche ven el día y en la tempestad la calma», pues entonces todos
los ojos que verá serán ojos que no ven: fuera de sus cuencas,
chorreantes de sangre, pus y corrupción. Los verá en sus padres y
sus hijos, sus amigos y amigas, la gente que ama y detesta. Los verá
por doquier, y los verá también en su reflejo.

Lo segundo que dijo fue: «Bendito es el cuerpo que no siente, pues
su cuerpo siente lo superfluo y su alma siente lo esencial», pues
entonces su cuerpo no sentirá más que el dolor infinitamente
superfluo del vacío, y lo que verá en sus pares serán sus cuerpos
sin sensación: deformados y malolientes, casi en un estado pétreo de
descuidada descomposición. Los verán caminar por la calle y en su
casa, y en sí mismo verá su esqueleto deformado con los despojos de
su traición.

Lo tercero que se dijo fue: «Bendita es la tierra que los contiene,
el abrigo cálido para el invierno de los días», pues entonces la
tierra será el abrigo de la noche que asolará los días de este
condenado, encontrándolo solo si se lo busca. Entonces su Alma
pertenecerá por siempre a los Ancestros.

بقية في السلام (descansa en paz)


Fe de erratas:* SI NO CUMPLE EL CONTRATO, EL BENEFICIARIO NO FORMARÁ
PARTE DE *EL ENTE DEL MÁS ALLÁ
CUANDO MUERA, Y SU ALMA SE DESVANECERÁ
JUNTO CON SU CUERPO.

Pontuação: +0

14. el_helado_que_muerde,

no, yo lo felicitaba por la edición xd, yo ya havía escuchado esas historias, muchas en dros, otras en otros lugares

Pontuação: +0

15. ElvisTek,

Wow amigo, pedazo de historia. generalmente los creepypastas no son lo mío pero esta si que me impresionó. es muy buena sería bueno que siguieras posteando aquí las demás que tengas

Pontuação: +0

16. dreico ,

claro que seguiré posteando, como proeba de ello, con ustedes, sacrifício de almas...

Se sentó en el sofá más cómodo de la casa, el que estaba frente a la
ventana. La oscuridad se cernía lentamente a su alrededor, y mientras la
noche caía, sus ansias crecían. Su casa completamente a oscuras
irradiaba silencio de las tinieblas, en su ventana escuchaba la furiosa
tormenta; el repiqueteo de las gotas sobre el cristal le recordaba a su
infancia, a su época feliz.

Lentamente, con la calma que siempre lo caracterizó, estiró su brazo
derecho y activó el interruptor de las luces fluorescentes, las cuales
brillaron con su pálida intensidad sobre la sucia escena.

—Tráela de nuevo a la vida, y a cambio te daré mi alma. —Una ráfaga de
viento lanzó su cabello castaño sobre su rostro. Era un día hermoso,
para la gente común; el sol brillaba, alto en la cumbre del cielo, ni
una sola nube se asomaba del horizonte. Para Roger, era lo más triste
que podía ver.

—Estás seguro de lo que me pides —afirmó el hombre de traje gris que
estaba sentado frente a él con un puro en la mano y su cabello
pulcramente acomodado en negras ondas, con mechones grisáceos, hacia atrás.

—Sí, muy seguro. Quiero que vuelva. —Una ligera sonrisa se dibujó en su
rostro, invocando el recuerdo de sus labios, de sus grandes ojos negros
que lo iluminaban todo al pasar. Ella nunca lo amó; él la idolatraba en
secreto.

—Tendrás que ofrecerme dos almas a cambio —le dijo el hombre—. De lo
contrario, todo lo que has considerado sufrimiento en la vida no será
nada en comparación con lo que te espera.

La sonrisa en los labios de Roger se congeló. Miró fijamente a los ojos
de su interlocutor; intentó ver miedo, seguridad, intentó ver algo. No
había nada ahí, como si el hombre con el que hablaba estuviese muerto.

«Pero seguro que lo está, ve con quién hablo, por Dios», pensó él
mientras pasaba el dorso de su pálida mano por su frente perlada por un
sudor pegajoso, nervioso.

—Bien, ¿qué decides? —dijo el hombre de traje gris poniéndose de pie,
luciendo una deslumbrante sonrisa de dientes blancos y parejos—. Soy un
hombre ocupado, ¿sabías, Roger? —El hombre le guiñó un ojo y sintió cómo
unos espantosos escalofríos recorrían su espalda.

—Sí, lo haré. Te daré dos almas.

—Buen chico. —El hombre de traje se dio la media vuelta. Roger,
confundido, lo llamó.

—Ey, ¿es todo, no hay nada que firmar? ¿Nada de sangre que ofrendar?

—¿Sangre que ofrendar? —indagó el hombre, y sonrió como si lo hiciese
con un pequeño bebé—. ¿Qué es esto, el Medievo? No Roger, no te
preocupes por nada. Tú tendrás tu deseo, sigue las instrucciones de la
carta que llegará mañana a tu buzón y todo estará de maravilla. —Roger
medio sonrió, sus ojos castaños se tensaron. ¿Lo estaba bromeando?

—Una carta… ¿Qué es esto, el Medievo? —Soltó una ligera carcajada por su
débil parodia.

—Eres valiente, Roger. Muy valiente. Te veo pronto.

El hombre de traje se dio la media vuelta y se alejó a pasos firmes por
la avenida, no vio ni una vez hacia atrás.

La sala de Roger, fuertemente iluminada, parecía sacada de una escena de
algún libro de terror. El cuerpo desnudo de una mujer de piel trigueña
yacía inmóvil en el suelo; era obvio su avanzado estado de putrefacción,
la cual hacía a sus grandes pechos y su alguna vez suave piel el
espectáculo más grotesco que una mente sana alguna vez observó.

Al lado de esta, tendido sobre el suelo, boca abajo, había un hombre. Su
cabello pintaba algunas canas, iba vestido andrajoso, un vago sin duda.
Lentamente una mancha de sangre crecía a su alrededor, saliendo de su
cuello, el cual tenía aún un escalpelo clavado. El hombre respiraba
apenas, se aferraba a la vida.

Roger lavaba sus manos lentamente en la cocina, dejaba a su mente
viajar, iba al momento en el que conoció a Nadine, pensaba en el impacto
que tuvo en él, en todos aquellos días en los que su solitaria cama
ardiente rogaban por esas manos, por ese cuerpo perfectamente esculpido
por las manos de Dios. «Algún día será mía», pensó. Él hacía todo para
que ella se fijara en su existencia… Le enviaba rosas, le tomaba
fotografías, la invitaba a salir. Pero aun así, él siempre fue
invisible. Hasta aquella noche. Esa noche ella lo vio, y lo vio con
miedo. Él era un dios, y había decidido acabar con ella. ¿Por qué no lo
amaba? ¿Por qué huía? Él solo quería sus labios, quería su dulce voz
acariciando sus oídos mientras sus cuerpos se fundían en la pasión. Pero
ella corría, corría y gritaba, le lanzaba cosas y lo llamaba
«pervertido». Él no era un pervertido, él la amaba. Cientos de fotos,
las cuales rebozaban de sus brazos en ese momento, lo probaban. Él la
seguía para que estuviera segura, sabía lo que hacía, con quién lo
hacía, por su propio bien. Había mucha gente extraña allá afuera y Roger
no permitiría que nadie así se le acercara a Nadine. Roger soltó sus
fotografías y se lanzó sobre ella tapando su boca con una mano, y con la
otra tocando sus piernas, subiendo frenético hacia la hendidura entre
estas; ella forcejeaba, arañaba y mordía. ¿Por qué no lo dejaba amarla?
No lo merecía, esa era la respuesta, ese rostro angelical y ese cuerpo
de diosa no lo merecían, él era demasiado. Si no era de él, no sería de
nadie. Pero cómo la deseaba…

Sacudió su cabeza ligeramente, debía estar concentrado, era hora…

…Subió las mangas de su camisa hasta los codos, le dio una última mirada
a la escena: todos los muebles fuera de su lugar, haciendo espacio justo
en el centro de la salita, y en el suelo, dentro de un círculo dibujado
con cera en el piso, los cuerpos del hombre aquel y de su amada Nadine;
cinco cirios negros colocados en el contorno de este círculo, una daga y
un recipiente de plata. Roger entró cuidadosamente en el círculo, ya no
había vuelta atrás. Tomó la pequeña daga brillante que estaba sobre el
recipiente de plata, la levantó sobre su cabeza, y con los ojos
cerrados, exclamó:

—En tu nombre, demonio ancestral, ofrendo este corazón, así como su alma
y la mía propia, para volver a esta mujer a la vida.

Había aprendido las líneas de memoria, no supo si lo dijo con pasión o
solo con miedo, nada más pudo pensar en la sangre, en el sacrificio
(¿estamos en el Medievo?). Bajó la daga a la altura de su rostro y la
besó una vez… Con una furia salvaje arremetió contra el hombre, quitando
primero capas de ropa, para después pasar a la carne, rasgando,
rompiendo; la sangre corría por sus manos y por todo el piso, había un
charco negruzco y pegajoso a su alrededor. El pecho del hombre aquel
estaba grotescamente abierto de par en par con costillas y todo. Lucía
como algún grotesco tipo de mariposa encarnada, de aquellas que solo se
pueden ver en las más terribles pesadillas, y justo en el centro de esta
mariposa un corazón apenas palpitante que luchaba por bombear a su
cuerpo la poca sangre que aún quedaba. En cada latido el charco se hacía
más grande y el movimiento más débil. El corazón debía latir aún. Roger
tomó de nuevo con fuerzas la daga que con tanta sangre se resbalaba de
sus manos. Con su mano izquierda tomó el corazón y cortó carne, venas y
arterias que lo unían al cuerpo. Con el bulto palpitante y chorreante en
las manos, se puso de pie y gritó a viva voz:

—¡Está hecho! ¡Ahora vuélvela a la vida!

Se posó sobre una de sus rodillas y puso el corazón en el recipiente de
plata, para después colocarlo entre los grandes pechos putrefactos de la
mujer, y poco a poco, tomando la sangre del cuerpo del hombre,
acariciaba la gran herida en el cuello de ella; la tocaba despacio, como
si quisiera cerrarla solo con los dedos… Aquella gran herida que él
mismo había hecho aquella noche… Ella seguía corriendo, gritando. Lo
rechazaba, ¡ella no paraba de gritar! ¿Qué se suponía que debía hacer?
No tuvo más opción que tomar el cuchillo y hacerla callar… La silenció y
disfrutó, miró en sus ojos la luz, ese brillo de ternura apagarse
lentamente. La hizo suya una y mil veces, pero ya no servía de nada, ya
no era ella. Sentía su piel y sus labios cada vez más fríos, no había
amor, no había ternura, ni siquiera furia. Se separó de ella lentamente
y por primera vez se sintió vacío, tenía un frío que nada tenía que ver
con su desnudez o con la sangre en sus manos… Eran sus deseos
frustrados, su virilidad insatisfecha lo que lo hacía temblar de rabia.
Decidió conservar su cuerpo, así podría intentar a diario satisfacer su
sed de ella, de su cuerpo perfecto…

…Pero su cuerpo no era el mismo, día tras día cambiaba, se pudría, ya ni
siquiera podía acercarse, le causaba repulsión. Pero aún la deseaba,
algo debía hacer…

—Más vagabundos —Se escuchó una voz calmada y profunda desde la
oscuridad—. Siguen ofreciéndome vagabundos. ¿Por qué ya no habrá
personas ambiciosas? Como aquella madre e hijo que se ofrecieron
mutuamente por el bien de su granja… El chico se llevó una sorpresa, sin
duda… ¡O valientes! Los valientes son poquísimos, menos aún, como aquel
muchacho que me ofreció su vida… ¡Su padre cumplirá sesenta años este
mes! Tantas historias que corren por ahí, tantos nombres que la gente me
ha dado… ¿Será acaso que se sienten cómodos creyendo conocerme? Soy el
mismo, soy el único, el que fue desde el principio de los tiempos, la
serpiente y el león rugiente buscando a quién devorar —El hombre de
traje se acercó un paso hacia los cirios encendidos y titiló en la tenue
luz su deslumbrante sonrisa—. Bien hecho, Roger, bien hecho… Tengo mi
corazón, y un alma… Falta la tuya misma…

—Puedes tomarla, pero primero quiero verla viva, quiero ver el brillo en
sus ojos.

—Oh, pero ya está viva, ¿no la ves, acaso? —Roger volteó bruscamente a
ver a Nadine. Ella estaba ahí de nuevo, respiraba, su piel suave tenía
un color hermoso, sus labios voluminosos eran deseables, suaves. Él, con
sus deseos tan reprimidos, se abalanzó hacia ella y la tocó por todos
lados, tanto como pudo, pero algo no estaba bien. Algo seguía faltando.
Se alejó y miró sus ojos… estaban fijos, inexpresivos… Eran como los
ojos de él… ojos…

—…Sin alma —dijo el hombre del traje gris ensanchando un poco más su
sonrisa.

—Pero —balbuceó Roger—. Tú dijiste que le devolverías…

—…La vida, sí. Y ahí está. ¡Mírala! Más viva que… hace un par de horas
—El hombre soltó una baja y rasposa carcajada a causa de su propio
chiste—. Le devolví la vida, pero tú, querido amigo, tú le arrebataste
su alma… Yo me dedico a llevarlas, no a regresarlas… ¡Ahí está tu amada,
con vida! Ahora cumple tu parte del trato.

—Pero… se supone que puedes vivir sin alma. ¡Debes poder vivir sin alma,
el alma no es nada!

—Oh, pequeño pervertido, ¿por qué querría yo algo sin valor? ¿Por qué me
dedicaría a darle a la gente lo que quiere, a cambio de algo sin lo que
podrían vivir perfectamente? Debes revisar tus fuentes, pequeñuelo
—Roger se levantó, presa del pánico. Debía huir, pero ¿adónde? Él lo
encontraría, él sabría… Comenzó a correr, sentía cómo sus pies
resbalaban en el piso a causa de la sangre. Saltó el cuerpo del
vagabundo, y al caer, resbaló definitivamente, lo que lo dejó sobre sus
rodillas, justo frente al hombre de traje, el cual lo veía con una
sonrisa tan grande que resultaba difícil de comprender—. Es hora de ir a
dormir —dijo el hombre, y con un solo movimiento, tomó la vida de Roger.

El hombre del traje miró a su alrededor. La sangre derramada sobre el
piso, el vagabundo, Roger, la chica mirando al infinito y esbozando
despacio una malévola sonrisa en sus labios rosas. Su trabajo ahí estaba
hecho, ahora solo quedaba por ver quién relataría esta historia en
particular, qué tan cierta sería. Vio a la chica que poco a poco
comenzaba a moverse de nuevo y sintió su sonrisa vacilar. «La muy
maldita está volviendo», dijo con cierto humor y retrocedió hacia las
sombras, llevando su cargamento de almas y maldiciones entre los brazos,
acunados como a un infante.

Pontuação: +0

17. el-killer-lhp,

editado, fue un error mío. mil disculpas

Pontuação: +0

Última edição por el-killer-lhp, Nov 3 2021 19:35:59

18. Rayo.bgtr ,

y por eso el ya aclaró lo que ahcía, tu solo lo repetiste.

Pontuação: +0

19. el-killer-lhp,

editado

Pontuação: +0

Última edição por el-killer-lhp, Nov 3 2021 19:39:38

20. yishiro ,

mas arriba, el mismo dice que las historias no son de el

Pontuação: +0

21. Rayo.bgtr ,

editado por agresibo jaja.

Pontuação: +0

Última edição por Rayo.bgtr , Nov 3 2021 19:43:08

22. dreico ,

alguien me puede desír que puso sebi, no bi su comentario, quiero saber

Pontuação: +0

23. bebecita_de_chocolate ,

ea posteo para que mekede guardado xd :y viva todo lo de terror muy buenas historias

Pontuação: +0

24. James_Potter,

Che, sería genial tener una carpeta de drop para tenerlas a todas estas historias guardadas.

Pontuação: +0

25. el-killer-lhp,

vien, yo no fui agresivo, solamente me sorprendió y lo comuniqué. así que les pido porfavor aorrense comentarios como los de @rayo por ejemplo. pedí disculpas, y fue un malentendido. ¿es difícil de comprender? si lo es, claro que lo puedo explicar de una forma detallada. no miré vien, y me comfundí. ¿ok? si seguíis sin comprender iz a denunciar por mi gran y enorme falta a la moderación si la considerais tan así. saludos

Pontuação: +0

26. el_brillante ,

guardo el hilo, el otro se perdió y no se porqué pasó xd

Pontuação: +0

27. bebecita_de_chocolate ,

fué vorrado créo.

Pontuação: +0

28. Harry_Dresden,

guardo hilo

Pontuação: +0

29. barren_byron ,

guardo hilo! amo las historias de terror

Pontuação: +0

30. bebecita_de_chocolate ,

viva lo de terror!

Pontuação: +0

67 Mensagens, 3 Páginas:  1 2 3 ↖ Voltar a lista de tópicos

Responder ao tópico

Você deve estar conectado para poder postar.

Esqueceu sua senha? Criar uma conta